El EVE realiza un estudio del grado de satisfacción de su uso y prestaciones en empresas
El Ente Vasco de la Energía ha desarrollado desde el año 2011 un estudio de monitorización del uso de 17 vehículos eléctricos pertenecientes a diferentes entidades que facilitaron datos referentes a su experiencia práctica con el uso de vehículos eléctricos. El objetivo del estudio es conocer las ventajas y las barreras de este nuevo modelo de transporte en diferentes empresas y sectores. El uso de estos vehículos ha ahorrado 6.410 litros de carburantes y evitado la emisión de 16,5 toneladas de CO2.
El proyecto iniciado en el año 2011 contó con la participación de 8 entidades que se comprometieron a la incorporación de vehículos eléctricos en su flota y a la realización de un seguimiento y monitorización de los vehículos durante los primeros cuatro años de funcionamiento. Los vehículos participantes en el proyecto han sido 7 furgonetas de transporte Mercedes Vito E-Cell, y 6 turismos Smart Electric Drive y otros 4 Mercedes Clase A E-Cell.
Según los datos del primer año de funcionamiento, los vehículos cubren de manera satisfactoria los servicios a los que han sido encomendados, sin restricciones respecto al uso de vehículos convencionales. Las funciones que han acometido han sido el reparto de compras a domicilio, el reparto de paquetería, la distribución urbana de mercancías (denominada de última milla), así como desplazamientos de trabajo y servicios de car-sharing, es decir, alquiler por horas de vehículos eléctricos.
En segundo logar, el informe señala que la satisfacción de los usuarios en su experiencia de uso de los vehículos en las mencionadas funciones ha sido elevada. Este dato es relevante ya que, a pesar de suponer un cambio tecnológico que ha supuesto una adaptación así como el ajuste técnico de algunos vehículos, los usuarios se han adaptado perfectamente al nuevo modo eléctrico. Además, el estudio también señala que los usuarios han realizado conscientemente un esfuerzo mayor para llevar a cabo una conducción más eficiente, con el objetivo de maximizar las posibilidades de la limitada autonomía ofrecida por los vehículos eléctricos. Aún así, en todos los casos las recargas se realizaron durante la noche lo que resultó suficiente para cubrir las necesidades de energía de los vehículos para cubrir el servicio durante la jornada.
Cabe señalar que la infraestructura de carga de los vehículos eléctricos fue aportada por IBIL, gestor de carga del vehículo eléctrico participado al 50% entre Repsol y el Ente Vasco de la Energía. La experiencia de estos primeros usuarios ha sido de gran utilizada para ampliar el conocimiento de IBIL sobre las prestaciones de su servicio y la mejora de los productos que ofrece.
En cuanto a las mejoras energéticas, el uso de estos 17 vehículos eléctricos para cubrir diferentes servicios ha permitido recorrer 83.437 kilómetros en modo eléctrico, con un consumo de 20.433 kWh que sustituye directamente el consumo de 6.410 litros de carburante en vehículos convencionales y, por tanto, evita la emisión de 16,5 toneladas de CO2 a la atmósfera.